A lo largo de la cadena de suministro, el equipo de Productos Abadi utiliza diversos sistemas de inspección para corroborar que los alimentos estén en buen estado, no haya riesgo de patógenos y, en general, sean seguros para su consumo.
Hoy en día, existe una amplia gama de sistemas tecnológicos que optimizan este procedimiento de seguridad, como los rayos X.
Cuando en la industria mencionan este término, las personas suelen asociarlo con radiación dañina; sin embargo, esta creencia está alejada de la realidad.
¿Cómo funciona la inspección de alimentos mediante rayos X?
La detección con rayos X es cada vez más popular entre los actores de la industria de alimentos, dado que es una tecnología que cumple con los requisitos de las regulaciones y es capaz de identificar contaminantes físicos difíciles de percibir con otros métodos.
Cuando un rayo X atraviesa un alimento, reconoce sus características internas con el fin de determinar si tiene contaminantes (como metales, cristales, residuos de hueso y otros plásticos). Una vez que el rayo sale del alimento, un sensor lo convierte en una imagen en escala de grises para visualizar lo que el rayo X detectó.
Si el producto está contaminado, la máquina señalará inmediatamente la ubicación en la imagen. Así, el personal responsable puede identificar más fácilmente dónde está el daño, descartar el alimento y generar un reporte.
El uso que más le dan a los rayos X es la inspección de productos empaquetados (latas, botellas, frascos y bolsas, por ejemplo), pero diversas investigaciones apuntan a que sería ideal aprovecharlo para revisar también verduras, productos cárnicos, frutas y cereales.
Aunque un sistema de rayos X no es barato, invertir en uno trae buenos resultados a largo plazo, ya que mejora la inocuidad alimentaria –la calidad que las empresas como Productos Abadi buscan obtener siempre– y contribuye al ahorro futuro de costos en los procesos de inspección.
Productos Abadi: Lo que las compañías deben tomar en cuenta antes de comprar un sistema de rayos X
Los beneficios de la detección con rayos X son evidentes, pero antes de adquirir uno, hay que comparar los distintos sistemas que hay en el mercado y analizar cuál responde mejor a las necesidades de la compañía.
Estos son los factores que hay que considerar:
- Cumplimiento de los estándares de inocuidad pertinentes, como las certificaciones ISO que tiene Productos Abadi, así como otras normas nacionales e internacionales.
- Frecuencia del mantenimiento que tendrá que recibir el sistema.
- Potencia de los rayos X y el tamaño del haz.
- Que el software sea sencillo de entender y utilizar.
- Vida útil de los componentes del sistema.
- Claridad de la imagen.
- Bajo costo de propiedad (tomando en cuenta un periodo de cinco a 10 años).