Garantizar la inocuidad alimentaria es una de las responsabilidades más importantes de Abadi Distribución de Alimentos, dado que esta garantiza el bienestar de los consumidores y avala la excelencia y calidad de la empresa.
Cuando hablamos de inocuidad alimentaria, nos referimos al conjunto de medidas que deben seguir las empresas del sector para preservar la seguridad, calidad e higiene de los alimentos durante la producción, almacenamiento, distribución y preparación de los mismos.
A través de varias capacitaciones y certificaciones, Abadi se asegura de que sus colaboradores conozcan y lleven a cabo buenas prácticas de inocuidad; esto incluye saber detectar a tiempo los contaminantes que puedan poner en riesgo a los alimentos.
Existen diversos tipos de contaminantes y el equipo de Abadi Distribución de Alimentos está capacitado para identificarlos y prevenir su propagación.
Abadi Distribución de Alimentos: Los 3 tipos de contaminantes en alimentos
Hay tres tipos principales de contaminantes que pueden afectar los alimentos en las distintas etapas de la cadena de valor.
- Biológicos
Esta clasificación es una de las más comunes, dado que se refiere a la contaminación bacteriana, la cual puede ser ocasionada por las propias personas o por otros seres, como los roedores, las plagas, hongos y parásitos. Este tipo de contaminantes ocasionan enfermedades como la salmonela.
Las maneras para evitar los contaminantes biológicos son:
- Mantener los alimentos en temperaturas adecuadas y manipularlos y prepararlos de la forma correcta, especialmente los cárnicos.
- Limpiar y desinfectar continuamente los utensilios para prevenir contaminaciones cruzadas.
- Organizar y separar los alimentos correctamente.
- Tener un protocolo de higiene y desinfección adecuado en las instalaciones.
El personal de Abadi Distribución de Alimentos sigue medidas de higiene y seguridad estrictas para garantizar la inocuidad de las comidas que abastece y distribuye diariamente.
- Químicos
Durante la etapa de producción es más fácil que los alimentos entren en contacto con sustancias como plaguicidas o herbicidas; sin embargo, durante su almacenamiento es importante mantenerlos alejados de productos como los detergentes para prevenir una contaminación accidental.
En esta categoría, también existen los contaminantes químicos que se producen tanto por la actividad humana como de manera natural, tal como sucede con el mercurio y el arsénico.
Para prevenir estos contaminantes, es necesario:
- Etiquetar y almacenar los productos químicos separados de los alimentos.
- Desechar los recipientes con pérdidas de producto.
- Seguir las instrucciones de las sustancias químicas utilizadas.
- Usar los plaguicidas de la manera adecuada.
- Físicos
Por último, se encuentran los contaminantes físicos, los cuales son objetos externos que, si bien no son tóxicos, pueden ocasionar graves problemas de salud o asfixia:
- Plásticos o cristales
- Huesos, astillas, espinas o cáscaras
- Trozos de metal o madera
- Objetos personales portados por las personas involucradas en la cadena de valor (joyería, por ejemplo)
- Cabellos o uñas
- Insectos
Evitar estos contaminantes también es sencillo si se siguen los protocolos adecuados, así como lo hace el equipo de Abadi Distribución de Alimentos:
- Portar el equipo de protección adecuado (delantal o filipina, cofia, cubrebocas, etc.).
- De preferencia no usar joyas u otros objetos personales.
- Llevar uñas bien cortadas y realizar un adecuado y continuo lavado de manos.
- Deshacerse de los utensilios que presenten imperfecciones, como despostillado, agrietados o rotos.
- Si se lleva un vendaje, elegirlo de un color llamativo para identificar rápidamente si alguna partícula cayó en los alimentos.